Carta a un amigo

Son las 16 30, mi teléfono hierbe y no me apetece mirarlo ni contestar a todos los que me llaman y mandan mensajes, espero que me comprendan, espero que me perdonen. Intento distraerme con otras cosas, pero sin éxito. Éxito, menuda ironía. 

Llamo una y otra vez a tu teléfono para escuchar tu contestador “Hola soy Sergi Verge, en este momento no te puedo atender porque estoy vendiendo una casa, déjame tu mensaje y te llamaré en seguida, disculpa las molestias.” 

¿Como empezar? Tengo la necesidad de escribir y decir tanto y no tengo ni idea de cómo hacerlo. Esto es un palo muy gordo.  

Tu eras especial, lo fuiste desde que te conocí. Mi primer recuerdo tuyo es en Valencia, en el congreso de Asicval. Fue la primera vez que interactuamos; yo como quien dice empezaba y tu ya reventabas escenarios. Dabas esa mañana “El poder de la exclusiva” y me senté en las filas posteriores para ver por primera vez esa “magia” de la que tanto había oído hablar, esas 4 horas que  tantas vidas profesionales habían cambiado. Recuerdo, sin conocerte, haber preguntado por ti a terceros y haber contrarrestado con incredulidad a las respuestas de halago; “Pero qué pasa, que es Jesús?” Y siempre me encontraba la misma respuesta; Tu ves y escúchale. 

Ese día empezaste flojo, se notaba que habías salido el día anterior, nunca fue un impedimento para ti. Te bebiste 4 botellines de agua la primera hora. Pero tu presencia, tu saber estar, tu voz que no temblaba ante más de 200 personas… nOs tenías a todos pendientes. De golpe parabas y recitabas un poema de un libro y seguías con ese tono que solo tú sabías poner, el tono pedagógico por excelencia, para acompañar lo que habías leído de una reflexión, aún con las gafas “del cerca” puestas. Tu poder hipnótico. Eso que a muchos les gustaría tener y que solo algunos elegidos como tu habéis tenido. Llegó un momento en que lanzaste una frase que apareció en el slide del PowerPoint que llevabas (Putos PowerPoint! La de veces que nos habíamos reído de eso).  El Powerpoint Lo hacías ir y venir de forma desordenada y como a ti te venía en gana. No te cortabas,  lo explicabas abiertamente “esto no está por orden, yo lo muevo en función de cómo lo veo”. Maldito genio, he aprendido tanto de ti. En esa slide en concreto aparecía la frase  “El fin último del agente inmobiliario es ser recomendado”. Pensé para mis adentros “este cabrón me ha robado la frase”. La leíste, levantaste la cabeza y sonriendo dijiste “esta frase es de Pere Maymi, Pere estás por aquí?” Levanté la mano tímidamente, mi ego en ese momento estuvo a puntito de reventar. Lo que pocos sabrán  es que a ese día llegamos tú y yo sin haber mediado palabra alguna. Ya me tenías fichado, no se te escapaba nada. Ese día te juré amor  eterno y no tanto por la mención sino por la generosidad. A partir de ese día cada vez que dabas un taller lo sabía, los asistentes me mandaban mensajes con la frase cuando aparecía en en el slide tu “puto PowerPoint”. 

Ahí empezó todo, nos llamábamos, comentábamos, este qué hace, aquel que bueno es, que malo es aquello, Mira lo que he pensado para el AIC, dime que te parece el video de promo, como hilarías esto con aquello, Mira lo que voy a hacer…. Joder Sergi, la de cosas que hemos hablado y la de vueltas que le hemos dado a nuestras cabecitas. 

Cuando estaba contigo lograbas que me sintiera un “Enfant Terrible”, parte de un dúo indestructible capaz de tumbar argumentalmente a quien se pusiera por delante sin más armas que la razón. Éramos irreverentes, desafiantes, valientes, nos habíamos propuesto contar juntos cosas que ayudarán a los demás que aprendíamos de otros autores y reinterpretábamos para el sector. Joder que charlas Sergi, hojalá las pudiera tener grabadas. Ninguno de los dos se había movido nunca por dinero, ambos  sabíamos que no nos haríamos ricos, hacíamos lo que hacíamos porque adorábamos compartir, porque la adrenalina del que te escuchen y notar que aportas es mejor que el sexo o cualquier droga mundana, porque aportar y entretener a la vez no se paga con dinero. 

Siempre pensé que éramos fuente de aprendizaje el uno para el otro. 

Finalmente te descubrí de verdad; 

una vez te propuse grabar un video para los cursos y lo grabaste en la primera toma (nunca te hizo falta una segunda, cabrón, nunca), eras muy bueno. Una vez grabado el vídeo venía el tercer tiempo; bar,  café y a darle al coco y a los puntos de vista. En  conversaciones como esa descubrí que existía otro Sergi. Mi amigo era más tímido, más de escuchar que de hablar, más de reflexionar que de lanzarse, ese era el Sergi de verdad, no el de los escenarios. El del escenario no eras tú, tú eras el vecino de Calafell al que todo el mundo conoce en el pueblo, el que tenía amigos de toda la vida con los que iba a tomar cervezas,de los que conocía su vida de principio a fin. Entre ellos, Sergi era uno más. Ese Sergi no era el habitual, ese Sergi era mi verdadero amigo.     

Más tarde llegó el Inmocionate de Port Aventura, recuerdo como si fuera ahora  cuando te llamé nada más salir de la reunión para decirte que íbamos a dar nuestras ponencias en la sala grande de forma consecutiva. “Lo vamos a petar” te salió del alma. Estábamos radiantes de felicidad, de ahí salió ese Flyer que hicimos “Si no te gusta el Rock, toma dos tazas” que promocionamos como si no hubiera un mañana. Y mal me esté decirlo, lo petamos y tú, cómo siempre, lo volviste a bordar. Lo bueno es que lo pasábamos bien, nos dábamos el relevo como si fuera un cambio en un partido de fútbol, nos felicitábamos y lo celebrábamos luego. 

Más tarde nos llamaron de Fotocasa, para ir a dar una charla, éramos 5 ponentes y tu llegaste de resaca. Como he dicho, nunca fue un problema,  lo volviste a bordar, y esta vez además acogiste a tu charla comentarios de lo que habían dicho los demás ponentes. Como nos reímos con tu comentario sobre “las putas máquinas del Quintana” después de la lección magistral que dio Francesc sobre Inbound Marketing. Cada vez que me acuerdo me echo a reír. 

Y de ahí a nuestra visita a DDB Spain con el Viñals, que montaste tú para mi,  las quedadas en terrazas de verano cerveza en mano, de la ilusión por tu nuevo apartamento de soltero… Y nuestros proyectos de futuro 

¿Y nuestros proyectos conjuntos Sergi?, proyectos preciosos, proyectos… que ya no serán  ¿Quién va escribir el libro del poder de la exclusiva que me dijiste que escribirías? ¿Dónde quedan esas ponencias que teníamos que dar a dúo? ¿No tenía que ayudarte con el AIC de este año “Sin cobrar un duro”? ¿A quién voy a llamar para explicarle mis excentricidades mentales? ¿Quién me va a llamar a mi para que le aclare como coño funciona Zoom? ¿Quién me va a hacer ese arroz de pobre con un muslo de pollo y cuatro verduras? ¿Con quien voy a hacer los Instagram live sin previo aviso? Estoy roto de dolor, no me imagino como va ser este circo sin ti.  

El impredecible Sergi, el único, el indiscutible, el hombre al que no le importaba estar permanentemente expuesto, has dado tanto al sector y has dejado tal herencia que vas a vivir muchos, muchísimos años más en nuestras memorias. Se nos ha ido un tesoro. 

“Pajaritu, allà on siguis espero sàpigues que t’estimo molt i que per mi el món sense tu será un món molt pitjor”. 

 

Comentarios

  1. Sin palabras Pere, más que las que expresaste en este tremendo escrito.
    Siento muchisimo su partida y agradezco tremendamente todo lo aprendido de él y su cruce en mi camino.

    Un abrazo fuerte!

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  2. Tot el meu soport a la fiera de Breda. Abraçada forta i ens veiem aviat!!!!��

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  3. Que bonic Pere, quina gran pèrdua, una Forta abraçada

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  4. Gracias Pere por estas palabras tan sentidas y de corazón . Ha sido muy bonito leerte. Gracias.

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  5. Un abrazo fuerte a tí y a él por todo lo que nos enseñó. Una gran pérdida.

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  6. Impresionante Pere, no soy de llorar, y te aseguro que tengo cristales en los ojos, lo has conseguido con esas vivencias que nos has contado con el Puto Amo Sergi...
    Yo lo conocí en un evento que daba Carlos Rentalo.Ya casi a medio evento, se me sentó al lado un señor con una gorra y me dijo...
    hola Joan, yo me giré y cual seria mi cara, de no conocer, que me dijo soy Sergi Verge, yo me quedé alucinado, (es Sergi, no lo he conocido, y en cambio el a mí sí ) Me disculpé por no ser muy buen fisonomista, ( tambien hacia poco se habia puesto la gorra del Poder de la Exclusiva) nos hicimos algunas fotos, charlamos un poquito, pero en mi nació un sentimiento de admiración muy muy grande, y que ahora hace que me duela el alma.
    Sergi donde estes seguiras sieno el Puto Amo...
    .

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